lunes, 3 de agosto de 2009

Ser o No Ser en las Tierras de Den

-A manera de un Karaoke para el viaje-





Lo primordial en estos tiempos modernos, querido Horacio, es en mi franca opinion tener que cerrar aquellas puertas interdimensionales que no provocan mas que la invasión en nuestra frágil morada terrenal por parte de los hiperboreos que no traen siempre las mejores intensiones. Sabes que me hice tildar de loco pero algo de la vieja cordura preservé en mi corazón y sabes que no me dejé apasionar hasta rebosar de locura.

Hemos descubierto que eran ciertas nuestras presunciones en torno a la canallesca jugada: quieren entregar nuestro hogar paradisiaco a los verdaderos culpables de tanta confusión, guerra y politicastros. Estos son apenas esbirros que allanan la senda para que los tiranos de la antigûedad vuelvan a asentarse en los asuntos gubernamentales del planeta en que vivimos.


Sabes que dejé hace rato de perseverar en mi deseo de probar mi verdad, se que por dentro he triunfado contra el demonio de la frustración y la verdad esta gran estancia de Elsinor no me provoca sino las nauseas de no discernir entre lo correcto y la equivocación. A duras penas nos enseñaron mas que a reir y a vestirnos de payasos de lujo para las fechas memorables y las jornadas de peña cultural.

Y de cuantas cosas todavía me quedan por descifrar prefiero callar, Horacio mejor me vale seguir haciendo resplandecer el fruto de la duda y el silencio. Soy el que piensa y hace mas lento el ritmo de la lectura mientras se refleja en las esfinges de la semántica. Sigue buscando como el niño que ronda por la fuente de la plaza reconociendo monedas de diferentes orígenes al fondo de esas aguas en que los apasionados y los amantes arrojan su cuota de amor como tributo de las supersticiones encantadoras.


Quizás algo ande mal en el reino de la serpiente (Den-mark), posible estación de Quetzacoatl en los corredores de la Tierra Hueca, aprovisionado de magias, ambiguos caminos de conocimiento y la confimación de los eventos postreros.

Aún dudo que la frase de Fortimbras cuando morí se refiriera a una esperanza real para mí Horacio: que si hubiése sido mi reinado el mejor de la historia de este país: Papá tu nos economizaste el tener que buscar un cielo, Claudio no hizo mas que compartir las lentejas de Judas y Brutus.


La duda? La Certeza? Creo que he soportado los visos traumáticos de mi controversia contra todo y en contra mía.

2 comentarios:

Zayi Hernández dijo...

Al principio divagué...ahora creo tenerlo más claro... hablamos de Qintus Horatius Flaccus??? el poeta???... no sé si me equivoco, pero al referirte al padre, recordé que Horacio solía hablar mucho de su padre... igual estoy errada, pero viajé para aquel siglo....
Besitos.

Unknown dijo...

Horacio, Hamlet, la cáscara de nuez que es el mundo! como se compagina el conocimiento que verdades nos revelan los clásicos!!! tremendo texto alegórico!

en el finde te pongo la Cbox!


Chau, un abrazo!!!