domingo, 15 de agosto de 2010

Cuántos Despellejamientos

Cuantos despellejamientos
en esas carnes que se rozan,
erizando los vientos
con lenguas flamígeras.

Con mármol de piernas
que se aproximan
a su hora lúbrica,
brazos que no bromean
con el roce de cabellos

Solo le caes en gracia
a los ángeles con hombros
trémulos y parlanchines
ansiosos de jugar con sus manos
en los asientos de pluma y lechos ligeros.

Consejo del ama de llaves:
quédense los amantes bajo llave
ignoren la lluvia prométanse el goce
y devoren el mar de exquisitos susurros
y los devaneos undívagos y pélvicos

Sonido de tu amor
cada que aguardas sin convercerte
las elecricidades del oido
la elevación del tacto
los picos celestiales
donde los dedos comprenden
su traviesa fanrarria

pronto los caballetes de magia
escribirán de nuevo
el libro del génesis
y a la puerta de tu casa
traerán de vuelta tu amor
y la poesía de tus lágrimas
y querer sea cercana una
posibilidad de seguir junto a tí

y si no que se le va a hacer
llorar quizás pero adelante seguir
seguro que no nos moriremos en uno por el otro
y tampoco es para decirnos entre nosotros
hasta de lo que nos hemos de morir

2 comentarios:

Zayi Hernández dijo...

Bravo!!!
Sólo los que han amado en la distancia pueden hacer esto. Te has quitado el pellejo, sólo hemos visto corazón.
Un beso.

Antoine Gerris Protevs dijo...

mijo anda inspirado!